Dicen que el amor todo lo puede y hay cosas que realmente lo demuestran, tal y como sucedió tras el final del partido correspondiente a los octavos de final de la Copa Mundial Femenina de Francia entre Suecia y Canadá.

Las europeas se impusieron por la mínima con un gol de Sina Blackstenius que desató la celebración de las escandanivas y en medio de la misma la jugadora Magdalena Eriksson fue a festejar con su novia.

Su pareja es una colega de profesión, Pernille Harder. Hasta allí nada fuera de lo normal salvó que ella es de la selección de Dinamarca, la cual Suecia le quitó el cupo en las eliminatorias europeas.

Pero esto no fue motivo para que Harder no cambiara sus colores en la competición y durante todos los encuentros se le ha visto con la camiseta sueca para dar todo el apoyo que necesita su amada.