Después de 30 años, el Liverpool volvió a celebrar un título de liga. Los Reds se coronaron como los nuevos monarcas de la Premier League tras la derrota del Manchester City ante el Chelsea, lo que hizo que los festejos fueran más íntimos que en la cancha.

Y uno de los que aprovechó no tener las cámaras encima fue Jürgen Klopp. El técnico de los Reds y uno de los grandes responsables de las últimas grandes campañas no escondió su alegría y se lució bailando al centro de la pista.

A tal punto llegó su locura que los propios jugadores lo empezaron a animar para que se moviera mucho más. Y si bien fueron más ganas que talento, nadie le podía sacar la sonrisa de la cara al alemán.

Más allá de lo que se pueda decir sobre su talento a la hora de bailar, lo cierto es que Klopp sigue demostrando por qué es uno de los mejores técnicos en la actualidad. ¿Podrá repetir la hazaña la temporada que viene? Habrá que esperar.