Bayern Múnich volvió a las canchas luego de la fea polémica que marcó su semana. Los bávaros disputaron la fecha 28 de la Bundesliga este sábado por la mañana, ocasión en que Sadio Mané estuvo ausente al cumplir su castigo por haber agredido a su compañero Leroy Sané.

Ambos tuvieron un encontrón después de su partido por la ida de cuartos de final de la Champions League. Tras haber sido goleados por el Manchester City, el senegalés discutió con su compañero y la discusión terminó en golpes, algo que quedó evidenciado en el rostro de Sané.

El seleccionado alemán saltó a la cancha este sábado con su labio evidentemente hinchado, una imagen que ya fue ampliamente difundida por redes sociales. Sané fue titular en el equipo de Thomas Tuchel y disputó 59 minutos por el Bayern, que igualó 1-1 con el Hoffenheim.

En la previa del partido, el entrenador de los bávaros aseguró que Mané se disculpó con el equipo y que el Bayern vive una "atmósfera positiva" luego del incidente. Además de no ser convocado ante el Hoffenheim, el senegalés fue multado como castigo por el incidente.

"Eso está arreglado. Un partido y una multa son las consecuencias de lo que pasó. Yo no lo vi porque estaba con el cuerpo técnico. Por supuesto que inmediatamente hablé con todos los involucrados, los jugadores y el cuerpo técnico", declaró Tuchel.

"Sadio cometió un error. Soy el primero en defenderlo. Lo conozco desde hace mucho tiempo y solo lo conozco como un profesional total. También conozco a su entorno. Nunca ha sido culpable de nada. Fue contra el código de conducta, lo reconoció y se disculpó", sentenció.