Colo Colo y Universidad Católica animaban un entretenido partido por la Supercopa en el estadio Ester Roa Rebolledo de Concepción cuando todo se cortó de manera abrupta cerca de la media hora del primer tiempo: gente apostada en la tribuna Andes de ambos equipos comenzaron a enfrentarse con lanzamiento de objetos contundentes, metieron carteles publicitarios y hasta se detonaron peligrosamente fuegos artificiales a nivel de piso. 

Rápidamente, jugadores como Leonardo Gil y Felipe Gutiérrez saltaron las rejas papales para tratar de calmar a los sujetos quienes hicieron caso omiso y siguieron con su agenda propia, lo que obligó a los futbolistas a retirarse no sólo del sector, sino que de la cancha rumbo hacia camarines. 

“Esto es indignante”, comentaron los futbolista de manera unánime y con mucha rabia en el túnel a la transmisión oficial de TNT Sports mientras se esperaban los pasos a seguir. 

Finalmente, y luego de largos minutos, los equipos volvieron a la cancha para hacer un trabajo precompetitivo para reactivarse y se hizo un “colchón” entre ambas facciones que se peleaban inexplicablemente. 

Cabe apuntar que, salvo ese grupo, el comportamiento del resto de las 18 mil personas asistentes al Ester Roa Rebolledo de Concepción fue ejemplar. Una pena