Uno de los momentos más recordados de la selección chilena fue el empate 2-2 conseguido en el estadio Monumental en las Clasificatorias rumbo a Alemania 2006.
Un partido que comenzó mal para la Roja de Juvenal Olmos, que se fue al entretiempo con un 2-0 abajo. El segundo tiempo fue distinto con el ingreso de Kike Acuña, quien se comió el mediocampo.
En conversación con el Instagram de Redgol, el ex volante recordó una jugada clave para el encuentro: su empujón a Pablo Aimar.
“Cuando ando en la calle me preguntan por el empujón a Pablo Aimar. En ese partido hay un antes y un después, de ser un jugador que me conocía más gente de Católica, con ese partido me conocía todo Chile”, comenzó.
Además detalló cómo fue el momento exacto con Aimar. “En el primer tiempo Argentina fue inmensamente superior. Con ese empujón yo me creía dueño del partido, me sentía un líder dentro de la cancha, con mis ganas, entusiasmo fue contagiando a mis compañeros y luego empatamos”, expresó.
Para finalizar, Kike Acuña recordó el partido siguiente contra Perú y la ovación que se llevó en el Estadio Nacioanl. “Sale Marcelo Salas al Estadio Nacional y es una ovación, luego salgo yo y el estadio se cae abajo: ‘Kike, kike’. No sé si volveré a vivir una situación así, ojalá como técnico”, sentenció.