Un día después de la barbarie ocurrida en la revancha de Universidad de Chile contra Independiente de Avellaneda en Argentina, por los octavos de final de la Copa Sudamericana, siguen apareciendo reacciones.
Tras la encerrona de la barra de Independiente y la policía argentina, los hinchas azules presentes en el estadio Libertadores de América fueron literalmente linchados en una masacre inhumana, que dejó varios heridos, muchos de ellos de gravedad.
En el programa No Es Para Tanto de TNT Sports Chile, la periodista Sabrina Otaegui, que cubre la actualidad del Rojo para TNT Sports Argentina, realizó un escabroso relato de los horrorosos hechos. La reportera sostuvo que los barristas de Independiente entraron lisa y llanamente a “cazar” a los pocos hinchas rivales que no lograron salir del estadio.
“La verdad es que no fue una tragedia de milagro. Comenzó antes de finalizar el primer tiempo, cuando empezamos a ver que la parcialidad sur de Independiente baja y había dejado un hueco en la galería, dejando un hueco. Nos empezó a extrañar porque nadie de seguridad percibía eso… ni de la Conmebol… por qué estaba pasando eso”, dijo Otaegui.
Brutal testimonio de la falta de humanidad de los hinchas de Independiente
La periodista agregó que “empezamos a ver como la parcialidad chilena empezaba a lanzar butaca, azulejos y demás proyectiles a los hinchas que estaban abajo. Fueron como cinco advertencias por los parlantes del estadio, que pedían dejar de arrojar proyectiles. Ahí se pidió que la parcialidad de la U abandonara su sector del estadio”.
“Empezó a irse gente de a poco. Después un segundo grupo. Un tercer grupo. Y cuando quedaban pocos, que pensamos que se volvería a reanudar el partido, ahí ingresó la barra brava de Independiente a cazar“, complementó drásticamente.
“Y digo esta frase: a cazar, porque se fueron a cazar a hinchas de Universidad de Chile que quedaban en el sector sur alta. La verdades que fue impactante, las imágenes y observar eso“, profundizó.
Sabrina Otaegui sentenció que “no justifico a ninguno de los bandos. Los dirigentes de Universidad de Chile como de Independiente no pensaron en sus hinchas. Y la Conmebol debió suspender el partido en la primera advertencia. Ahí nosotros ya pensábamos que no se podía jugar y sentíamos un ambiente de tragedia. Por suerte no hubo víctimas fatales y esperamos que así continúe“.