Universidad Católica dejó una mancha negra en su derrotero por Copa Libertadores. El último partido ante Flamengo en San Carlos de Apoquindo estuvo marcado por insultos racistas y agresiones de parte de los hinchas cruzados contra sus pares brasileños, hechos que fueron condenados de manera transversal.

El elenco carioca presentó los antecedentes ante las autoridades de la Conmebol, y la UC se arriesga a duros castigos por el comportamiento del público. Pero los agravios calaron hondos en algunos jugadores del Fla, como reconoció Lázaro, autor del tercer gol de la visita y uno de los grandes proyectos del conjunto rubronegro.

El mediapunta de 20 años reflexionó sobre la experiencia que vivió en Santiago y el maltrato que recibió de un sector del público:”Creo que todos saben muy bien lo que puede pasar. Lamentablemente existen seres humanos que toman el racismo como algo normal, pero no lo es”.

El veloz atacante, sin embargo, se apiadó de los mal llamados hinchas del elenco estudiantil. “Que Dios bendiga sus vidas, y se tomen medidas”, sentenció al término del encuentro que Flamengo le ganó 2-0 a Altos, por la ida de la primera ronda de la Copa de Brasil.

Después de los incidentes de la semana pasada, Universidad Católica se expone a multas y restricciones de aforo por parte de la Conmebol, que ha sido estricta frente a hechos de esta naturaleza, como aconteción con River Plate y Boca Juniors.

La UC regresará este miércoles al ruedo internacional, cuando visite desde las 22:00 horas a Sporting Cristal en el estadio Nacional de Lima, encuentro válido por la cuarta fecha del Grupo H de la Copa Libertadores.