“Y, saben qué, está bien”. Esa frase del relator mexicano comentando el partido de la Copa América 2016 es archiconocida. La hemos mirado con una especie de sadismo, como disfrutando el momento que vivían los cuates. Es que Chile, aquel 19 de junio les pasó por encima.

Terminó 7 a 0. Una goleada histórica que ha quedado en la mente y el corazón de todos los chilenos que aman el fútbol. De hecho, ese hito fue coronado con la obtención de la segunda Copa América, en la final ante Argentina.

Sin embargo, para los mexicanos fue un día para el olvido. Uno de los que más lo sufrió fue el que tuvo que ir a buscar el balón siete veces al fondo de las redes. Se trata del portero Guillermo Ochoa.

Causa revuelo en la Selección Mexicana

Este martes, volverán a verse las caras. Chile se medirá ante México en el Mundial Sub-20 y siempre que este cruce se repite, nos acordamos del histórico momento. Para Ochoa no es algo grato, pero no por eso baja los brazos.

Resulta que el Memo está prácticamente dentro de la nómina mexicana que jugará el Mundial Sub-20. Pese a ello, el meta pidió expresamente no jugar en los amistosos que tendrán los cuates ante Ecuador y Colombia, lo que generó molestia en su país.

Esto, porque Ochoa sabe que tiene casi segura su ida al Mundial y frena las posibilidades para otros metas. Eso sí, para ser claro, el actual meta del AEL Limassol está considerado para ser banca del Tri, ya que el portero titular es Luis Malagón, del América.

Memo Ochoa se comió siete aquel día | Photosport

¿Qué otra cosa ayudó en la polémica del Memo Ochoa?

El grave problema que algunos ven en la prácticamente asegurada nómina de Guillermo Ochoa para el Mundial es que tanto él como Javier Aguirre, técnico de la Selección Mexicana, tienen el mismo representante. No sólo pasa en Chile.