Martín Palermo se cansó de hacer goles en su vida como futbolista y llegó a convertirse en uno de los máximos ídolos de la historia de Boca Juniors donde conquistó varios campeonatos con la camiseta azul y oro.

En una charla íntima con Olé, el actual entrenador de Curicó Unido aseguró que cuando jugaba con sus amigos en la calle tenía varios referentes en los que se reflejaba.

Uno de ellos es el capitán de la selección chilena en el Mundial de Francia 1998, Iván Luis Zamorano.

Martín Palermo en la banca de Curicó Unido (Agencia Uno)

“En esa época, en los 80, cuando empecé a ver a Maradona en el Napoli, yo miraba a Careca. Era un goleador que me gustaba. También Van Basten, Zamorano… Después, de los delanteros argentinos,Batistuta, el Beto Acosta, de esas características”, afirmó el Titán.

Muy humilde el ex delantero además cuenta que jamás se imaginó que tal como él decía ser un jugador famoso en sus pichangas, con el tiempo los niños decían ser Palermo.

Por eso, imaginarse ahí que en el futuro varios chicos iban a decir mi nombre, dentro de esa forma de jugar, era impensado.