Novak Djokovic (5°) volvió a jugar el Australian Open con hambre de gloria. Luego de que el 2022 no pudiera participar tras ser deportado, debido a que no tenía la vacunación correspondiente contra el Covidpara estar en suelo australiano, en esta edición está imparable.
El serbio se metió en semifinales tras barrer con el ruso Andrey Rublev (6°), en un duelo que se pronosticaba bastante más cerrado y que terminó a favor de Nole por un contundente 6-1, 6-2 y 6-4.
Djokovic apenas ha perdido un set en el torneo, ante el francés Enzo Couacaud, lo que refleja el gran momento por el que atraviesa a pesar de tener molestias físicas a lo largo del campeonato.
El serbio busca igualar la marca de Rafael Nadal de 22 Grand Slams ganados, siendo Wimbledon el año pasado el último major en obtener. En Oceanía, en tanto, ha salido campeón en nueve ocasiones, siendo el torneo grande en que más cómodo se siente.
Para obtener un nuevo título primero debe clasificar a la final, donde luchará ante el estadounidense Tommy Paul (35°), que venció en un partido muy peleado a su compatriota Ben Shelton por 7-6(6), 6-3, 5-7 y 6-4.
“Es muy importante para mí ser el primer estadounidense que se mete en unas semifinales del Open de Australia desde que lo hiciera Roddick. Recuerdo ver jugar a Andy cuando yo estaba empezando. Desde que era un niño, todos los entrenadores nos decían que el tenis estadounidense necesitaba una nueva estrella”, señaló Paul, quien adelantó que “enfrentarme aNovak en este escenario seráespectacular”.
En la otra semifinal, se enfrentarán el griego Stefanos Tsitsipas (4°) ante el ruso Karen Khachanov (20°). Ambos encuentros se llevarán a cabo en la madrugada de este viernes.