Javier Altamirano se encuentra en un buen estado de salud, luego de la convulsión sufrida en el partido entre Estudiantes de La Plata y Boca Juniors, lo que obligó a suspender el encuentro a los 27 minutos.
Tras una noche en que estuvo en observación en el Instituto Médico Platense, los doctores decidieron trasladarlo a otro centro asistencial para realizarse una mayor cantidad de exámenes.
Por eso es que en la mañana de este lunes salió visiblemente dopado hacia el Hospital Italiano, que se encuentra más alejado del centro de la ciudad.
Se le realizarán algunas pruebas médicas en ese lugar y en horas de la tarde Altamirano regresará al Instituto Médico Platense, donde continuará internado para monitorear su evolución.
Preocupación por su esposa
Javier Altamirano celebró un gol ante Godoy Cruz llevándose la pelota a su barriga, debido al embarazo de su esposa. Por eso también hubo preocupación por ella tras el acontecimiento del futbolista.
El club platense se preocupó de que no sufriera ningún problema debido a su estado, por lo que también fue internada junto a Altamirano en el mismo centro asistencial.
Continúa en ese lugar para evitar cualquier problema con el hijo que espera, pero al igual que el ex Huachipato también se encuentra bastante estable según los reportes entregados por el centro asistencial.