Byron Castillo ya se veía con turbante entrenando en Qatar, a pocos días del debut de la selección ecuatoriana en el Mundial ante la selección local. Sin embargo sus planes cambiaron luego de la determinación del TAS, donde aseguraba que su documentación contenía información falsa.
Eso llevó a la Federación de Fútbol de Ecuador a no inscribirlo para el Mundial, a pesar de que había jugado un amistoso contra Irak el sábado pasado. Por eso, se despidió de los que eran sus compañeros en la Tri y emprendió vuelo para otro lugar del mundo.
Castillo retornó a México, donde está viviendo, luego de firmar a mitad de año por el Club León. Y así se dejó ver en redes sociales, donde de buen ánimo espera lo que será el debut de Ecuador en el evento asiático, el que deberá mirar por televisión.
“Me encanta todo esto, si no fuera así, mi vida fuera bien aburrida”, comentó al enterarse que estaba fuera de la nómina de Ecuador, desafiando a sus detradctores que lo tildan de tramposo por jugar por una selección sin estar en condiciones de hacerlo.
Ahora la Federación Ecuatoriana de Fútbol deberá determinar si en el futuro continúa convocando al jugador, de cara a lo que será el inicio de las eliminatorias sudamericanas, pactadas para marzo del 2023 y donde los del Guayas partirán con tres puntos menos por el bullado “Caso Castillo”.
En lo inmediato, están enfocados en lo que será su participación en Qatar, donde luedo del debut ante los anfitriones chocarán contra Países Bajos (viernes 25) y definirán posiblemente su clasificación ante Senegal (martes 29), en el último partido del Grupo A.