El gran refuerzo de Colo Colo para la temporada 2020 fue el delantero argentino Nicolás Blandi, quien llegó desde San Lorenzo de Almagro, donde era capitán, con el cartel de goleador y figura, pero en Chile le fue pésimo.
El atacante con pasado en Boca Juniors jugó un total de 15 partidos por el Campeonato Nacional, donde participó de 681 minutos y apenas marcó dos goles, por ende, en el tramo final del torneo no fue considerado por el entrenador Gustavo Quinteros.
Blandi no está en los planes del Cacique para 2021, ni en los del estratega ni en los de la dirgencia, aunque hay un gran problema, tiene contrato vigente y de no llegar ofertas para que juegue en otro club, deberá quedarse en el estadio Monumental “obligado”.
“Me sorprendió lo de Blandi. Tiene un currículum muy interesante, jugó en Boca, San Lorenzo, Argentinos y tiene un muy buen promedio de gol. Pero tuvo muchas lesiones. Ese fue nuestro peor adversario, superar esas lesiones”, dijo Quinteros a ESPN.
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“A veces los jugadores van a un club y no pueden demostrar lo que saben. Le ha pasado a muchos jugadores. Hoy por hoy él está buscando opciones para salir”, agregó el estratega sobre el ariete.
Nicolás Blandi estuvo cerca de irse a Independiente, pero su alto suelto terminó por bajar la operación. En ByN siguen buscando opciones para que el argentino se vaya, lo que está muy complicado, debido a que su alto precio y sus malos números en 2020 dificultan que algún elenco se interese en sus servicios.
