El fútbol chileno recibió este fin de semana una triste noticia: el fallecimiento del legendarioAndrés Prieto.El mundialista en Brasil 1950 y posteriormente destacado entrenador se despidió de estemundo a los 93 años, dejando detrás un legado imborrable.

Y uno que lo recuerda con inmenso cariño es Carlos Caszely, cuya historia futbolística tiene una destacable conexión con el trabajo de Prieto: fue quien lo hizo debutar con la camiseta de Colo Colo cuando apenas tenía 16 años.

En diálogo con RedGol, el Chino rememoró aquel día: el 4 de febrero de 1967.El cuerpo técnico de Colo Colo, con Pedro Morales y Prieto, decidió darle una oportunidad al Chino en unduelo entre el Cacique y Peñarol que se disputadaba en el Estadio Nacional, válido por un Hexagonal amistoso.

“Llevábamos 15 ó20 minutos del segundo tiempo de Colo Colo y Peñarol. Me llamadon Pedro Morales, se acerca don Andrés y me dicen, ‘vas a entrar por Mario Moreno’. Y yo pensé para mí, ‘¡Mario Moreno, el Superclase!”‘, rememoró.

“Yme dijo: ‘Caszely, lo único que te pedimos es que hagas lo mismo que hacíasenlos entrenamientos, nada más’. Despues del partido me felicitaron mucho, mis compañeros, don Andrés y don Pedro. Fuemuy bonito, por eso nunca lo olvidé“, confesó.

“Andrés Prieto y Pedro Morales no solo me aconsejaron futbolísticamente, sino también en mi vida diaria.Soy un hombre muy agradecido, estuve con los familiares de don Andrés, tratando de contener un poco las lágrimas porque este año para mí ha sido durísimo“, relató.

Caszely recordó su debut en Colo Colo | Guille Salazar/RedGol

“Pero tenía que irpor el gran legado que no solo dejó en Chile, sino a nivel mundial: hay que recordar que jugó en España, y que fue técnico en México y Argentina, así que tiene muchos seguidores y recuerdos de todo el mundo“, añadió.

Entre la tristeza por la partida de quien le dio una chance en el fútbol, el Chino agradece el lindo momento que significó acompañar al equipo chileno hasta Perú por Copa Davis, viaje que asegura le hizo muy bien anímicamente en medio de un año difícil.

“Me hizo muy bien el viaje a Lima. Fueron cuatro días donde me desintoxiqué un poco de mi cabeza, además que fuicon misnietas, son bonitos recuerdos. Y allá en Perú, la gente mostróun cariño y respeto enorme. Lo pasébien, me distraje”, cerró.