Inter de Milán, sin la presencia de Alexis Sánchez ni Arturo Vidal por su reciente incorporación desde la selección chilena tras las Eliminatorias Sudamericanas, cayó con marcador de 3-1 ante Lazio en uno de los partidos más calientes que ha tenido la temporada de la Serie A en la que pasó de todo.

Los nerazzurri se fueron arriba en el marcador a los 12 minutos cuando Nicoló Barella consiguió un penal tras un contacto de Elseid Hysaj dentro del área. El encargado de ejecutar el disparo desde los 12 pasos fue Ivan Perisic quien cobró cruzado mientras que el arquero Pepe Reina optó por el otro palo.

Desde el manchón penal también llegó la igualdad, pero al segundo tiempo, por una mano de Alessandro Bastoni en un tiro de esquina. El implacable Ciro Immobile tomó la pelota aplicando la misma fórmula usada por su rival para poner el tanto del empate cuando faltaban poco menos de 25 para el final.

La gran polémica explotó al 81' cuando Felipe Anderson selló la remontada al aprovechar un rebote peor la jugada empezó con Federico Dimarco tendido en el terreno de juego mientras que todos los jugadores del equipo dirigido por Simone Inzaghi reclamaban para que lanzaran la pelota afuera.

Tras la anotación se generó una trifulca entre ambos equipos en la que el árbitro debió amonestar al autor del gol, Sergej Milinkovic-Savic y Lautaro Martínez. Lazio, además, le dio el golpe definitivo a Inter en tiempo de descuento en tiro libre centrado a la cabeza de Milinkovic-Savic, quien no perdonó.