Una noche con muchas historias se vivió en la madrugada de la jornada del viernes en el aeropuerto Arturo Merino Benítez, en la comuna de Pudahuel, donde arribó Charles Aránguiz con su familia para ser refuerzo de Universidad de Chile.

Fueron cerca de 100 hinchas los que se acercaron con banderas, cantos y mucha ilusión de ver al Príncipe, para decirle bienvenido a la U, pero de ellos fueron muy pocos los que realmente pudieron verlo, luego que se decidió sacarlo por otra puerta.

Aránguiz arribó en un vuelo LAN que llegó desde Florianopolis, que por las condiciones meteorológicas, tuvo un importante atraso, al igual que todos los vuelos que llegaron en la noche del jueves.

Fue el momento de sacar al nuevo refuerzo de la U, donde, si bien desde el club estuvieron presentes, pero aludieron que la organización dependía de su representante, se hizo todo para evadir a los hinchas.

Charles Aránguiz con su hijo en el aeropuerto. Foto: Cooperativa.

Charles Aránguiz con su hijo en el aeropuerto. Foto: Cooperativa.

Locura por Charles Aránguiz

23.44 marcó el reloj de la pantalla de arribos cuando el vuelo LAN 505 indicó aterrizado. Los hinchas cantaban y saltaban por la puerta principal, donde cientos de pasajes quedaron sorprendidos y algunos sin entender lo que pasaba.

Fue el momento de las corridas de hinchas, con rumores que volaban diciendo que saldría por otra puerta, las que son varias en el aeropuerto, sin tener alguna idea.

Fue a las 00.30 cuando Charles Aránguiz asomó con su hijo por una puerta del lado norte del aeropuerto, un plan que falló para salir por la cantidad de hinchas y donde, acompañado por carabineros y el jefe de seguridad de Azul Azul se devolvieron al interior.

Ese pequeño minuto fue aprovechado por hinchas para tomarse fotos, grabar videos, mientras Aránguiz, con una cara de nervioso, se preocupaba de sacar a su hijo entre la multitud.

Las maletas de toda la familia de Charles Aránguiz en el aeropuerto. Foto: Redgol.

Las maletas de toda la familia de Charles Aránguiz en el aeropuerto. Foto: Redgol.

El escape de Charles Aránguiz

Las horas pasaban y cerca de la 1 de la madrugada, los hinchas corrían de puerta en puerta. Seguían furgones y un carro policial, con la esperanza de volver a ver a Charles Aránguiz.

Por el sector principal salió la familia, en completo silencio, donde los acompañaban 9 maletas cubiertas con un plástico rojo, que era casi todo lo que se trajeron desde Brasil.

Mientras el temporal de lluvia y viento hacia volar basureros y los carritos de equipaje, haciendo destrozos en Pudahuel, muchos perdían la ilusión de verlo unos segundos.

La versión dice que fue sacado en un vehículo de carabineros, para luego lejos de la gente hacer un cambio a un furgón que lo llevó hasta un hotel, para prepara los exámenes para firmar como refuerzo de Universidad de Chile.

Charles Aránguiz con los hinchas de la U

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