Gustavo Poyet hizo su mejor presentación como DT de Universidad Católica en el momento en que más lo necesitaba: venció a Nacional por 3-1 por la tercera fecha del Grupo F de la Copa Libertadores, revivió en el certamen continental y encontró oxígeno cuando estaba siendo muy cuestionado. Pero, pese a ello, se tostó igual con el tono de las preguntas que le hicieron en la conferencia de prensa post partido, alegando “negatividad” en cómo se le plantearon las interrogantes.
Poco antes, manifestó que “habíamos estudiado bien a Nacional y sabíamos dónde podíamos hacer daño. Los jugadores que estuvieron de entrada y los que entraron lo entendieron perfectamente”.
Pero luego le consultaron por qué había costado tanto ganar y se quemó. “Me sorprende que todas las preguntas sean negativas. ¡Parece que hubiéramos perdido! ¿Si perdíamos eran positivas? Trabajamos para lo que pasó hoy. Jugamos mejor, hicimos más goles, hicimos el mejor partido del año. Seamos un poquito positivos que estamos un momento terrible a nivel mundial y disfrutemos un poquito del os partidos”, lanzó.
Volviendo al análisis, el uruguayo dijo que “tenemos que apuntar al máximo y el máximo es ganar todo. Si podemos repetir lo que hicimos hoy tendremos gran chance. Los rivales juegan, no es fácil. Me quedo con la palabra de Diego Valencia: disfruten, es Copa Libertadores, somos privilegiados y hoy todas y todos los aficionados de Católica disfrutaron”.
Sobre lo distinto, dijo que “cambió el entendimiento colectivo. En otros partidos tuvimos minutos y hoy fue más completo. El nivel de entrenamiento, la competencia que se da hace crecer al equipo y vamos a seguir mejorando. Espero que no sea un día, un momento, lo quiero ver el sábado, el miércoles y la semana siguiente”.
Finalmente, Gustavo Poyet dijo que “la idea nuestra de juego era tratar de hacer daño a pesar de estar organizados y defender bien. Teníamos que hacer gol, llevábamos tres partidos sin marcar. Un accidente puede cambiar el rumbo y hoy fue un penal lo que nos dio la opción de buscar más. Pegamos al palo, creamos más chance, el equipo dio un paso al frente y estoy muy contento por los jugadores, porque se pueden ir a casa contentos y a disfrutar del día, estaba pesado tras perder tres partidos”.
