Rockmond Dunbar, el actor que interpretó a Michael Grant durante las cinco temporadas de 9-1-1 decidió demandar a la cadena Fox, luego de que su salida se debería a las nuevas medidas sanitarias de la producción.
La nueva política de vacunas de la producción indica que el equipo que trabaja en la serie debe contar con sus esquema de vacunación completo para poder trabajar en el programa.
El actor aparentemente solicitó exenciones médicas y religiosas del mandato de vacuna COVID-19, pero según indicó 20th Television se negó.
Su salida se dio a conocer en noviembre de este año, en donde a través de un comunicado señaló: “Solicité adaptaciones religiosas y médicas de conformidad con la ley y, lamentablemente, mi empleador me lo negó”.
“Mis creencias sinceras y mi historial médico privado son aspectos muy íntimos y personales de mi vida que no hablo públicamente y no tengo ningún deseo de comenzar ahora”.
Asimismo, agregó: “He sido actor en este negocio durante 30 años, pero mis papeles más importantes son como esposo y padre de nuestros cuatro hijos pequeños. Como hombre que camina en la fe, espero con ansias lo que me depara el futuro”.
En una demanda presentada el jueves, Dunbar, alegó que su despido violó el Título VII de la Ley de Derechos Civiles de 1964 y el Empleo Justo de California. Ley de Vivienda, entre otros.
En la demanda, Dunbar destacó su mandato como el único protagonista masculino negro en la serie, alegando que no recibió una exención cuando otros miembros del elenco y equipo “no minoritario” del 9-1-1 lo hicieron en un set que requería vacunas.
“Según la información y las creencias, Disney tiene un historial de discriminación racial, y el Sr. Dunbar fue objeto de un trato desigual y una discriminación de impacto dispar en función de su raza”, decía la demanda, según Deadline. “Sobre la información y la creencia, los empleados que no pertenecen a minorías en situaciones similares no estaban sujetos a despido cuando rechazaron la vacuna COVID-19”.
La demanda también señala que “filtraron información negativa a los medios” sobre la partida de Dunbar, “incluyendo que buscó exenciones religiosas y médicas que le fueron denegadas”.
“Los acusados deliberadamente hicieron que pareciera que el Sr. Dunbar era un antivacunas recalcitrante, en lugar de presentar la verdad: que, al igual que millones de otros estadounidenses, es un partidario sincero de una creencia religiosa no convencional que le impide ser vacunado”, expresó.
La serie emitió el último capítulo de Michael en noviembre del 2011 en donde el personaje abandonó la ciudad para mudarse con su prometido a otro continente.