El veterano guitarrista de Queen, Brian May, finalmente se sinceró al contarle a sus seguidores que terminó en el hospital "muy cerca de la muerte", tras sufrir un ataque al corazón.

 

El músico de 72 años sufrió un doloroso accidente mientras "jardineaba" a principios de mayo, que lo obligó a acudir a un hospital y lo dejó con un desgarro en el glúteo debido a un desgarro y al nervio ciático comprimido.

Fue en ese momento que le encontraron tres arterias bloqueadas que detenían el suministro sanguíneo hacia su corazón. "Pensaba que era un tipo muy sano y todo el mundo me dice que tengo una gran presión sanguínea, un gran ritmo cardíaco y todo", comentó a sus fanáticos en un video que publicó en Instagram.

"Y me mantengo en forma, ando en bicicleta, sigo una buena dieta, sin demasiada grasa", complementó May.

Así, mientras se encontraba hospitalizado, sufrió el "pequeño ataque al corazón", en algo que describió como "unos 40 minutos de dolor en el pecho, y rigidez", con una "sensación en los brazos y sudor".

El músico remató asegurando que "la verdad es que estuve muy cerca de la muerte, aunque el dolor que sentía era provocado por otra cosa".