La paridad de género podría alcanzarse recién en 132 años. Así lo reveló el informe sobre la brecha de género del Foro Económico Mundial (WEF, por su sigla en inglés), que estudió los niveles de paridad entre hombres y mujeres en las áreas económica, política, educacional y sanitaria.

El estudio también evidenció que la pandemia del COVID-19 provocó la caída “de una generación” en cuanto a los progresos en materia de paridad.

Por ello mismo, según Saadia Zahidi, directora general de WEF, “corremos el riesgo de desandar el camino de las últimas décadas de forma permanente y perder los rendimientos económicos futuros de la diversidad”.

El campo con mayor desigualdad de participación es la política, donde la brecha mundial es de 22%, lo que indica que por cada mujer en cargos parlamentarios, ministeriales y en jefaturas de Estado, hay cuatro hombres ocupando los mismos puestos. Si la reducción en la brecha se disminuye al ritmo actual, recién en 155 años existiría paridad en participación política.

El segundo campo con mayor desigualdad, es la participación económica, que mide igualdad salarial, presencia femenina en la población laboralmente activa, especializaciones y otras materias relacionadas. Según el estudio, con el progreso actual, en 151 años se podría conseguir la paridad de género en materia económico-laboral.

Por contraparte, los ámbitos educativos y salud, son las áreas donde existe menor brecha de género, eso sí, WEF advierte que la situación podría revertirse, producto de un retroceso en estas materias.

Dentro del campo educativo, que mide la tasa de alfabetización y escolarización según género, tiene un índice del 94,4%, lo que señala un alto nivel de paridad, sin embargo, faltan 22 años para lograr la equidad de género.

Respecto al campo de salud y supervivencia, donde se midió la esperanza de vida y porcentaje de nacimientos de hombres y mujeres, la tasa es de 95,8% y pese a que los índices de paridad son más altos que en cualquier otro campo, el informe sostiene que se ha evidenciado un retroceso general que podría revertir la tendencia.