En el marco de la COP 25, el gobierno chileno anunció el cierre adelantado de cuatro centrales a carbón, aumentando así de 8 a 10 las centrales termoeléctricas que serán reemplazadas por energías renovables, que son más baratas y limpias.

Este cierre implicará el reemplazo de 700 megawatts que actualmente son generados por carbón, algo que implica una mayor contaminación ambiental y valores más altos por sus costos.

Según el ministro de Energía Juan Carlos Jobet, "en Chile tenemos 28 centrales en relación a carbón, las teníamos antes de la negociación del plan, y de esas acordamos cerrar ocho en la primera etapa entre el 2019 y 2024. Estamos incorporando dos centrales adicionales, por lo tanto, vamos a tener 10 centrales en fase uno, y además, hay dos de las que ya estaban en esas ocho originales que se adelantaron su fecha de admisión. Por lo tanto, hoy día en fase uno hay 10 centrales, y queda para la fase dos las otras 18, y tendremos que ir definiendo las fechas en la medida que pase el tiempo".