Desde el 1 de junio comenzó a regir nuevamente el horario punta o “recargo de invierno” en la energía, medida que estuvo suspendida en abril y mayo por el coronavirus.
El objetivo de este horario punta es racionalizar el consumo energético en los períodos de mayor consumo, que corresponden entre abril y septiembre desde las 18 a las 22 horas.
Esto permitió que las familias no pagaran el sobreprecio correspondiente al concepto de “energía adicional de invierno” en los dos meses anteriores.
Pero la medida volvió este 1 de junio, por lo que se restableció el “límite de invierno”, y quienes consuman más de 430 KWh entre las 18 y las 22 horas deberán pagar un sobreprecio.
Esto complica a los usuarios, sobre todo ahora que todo indica que las cuarentenas no terminarán, por lo que se hace imposible no consumir energía en la franja horaria.
Con esto, se estima que las cuentas de luz subirán entre un 40% y 60% por hogar.