Reinaldo Rueda estuvo lejos de sacar en cara el 4-0 de Chile ante Japón en el debut de la Copa América. Al contrario, el DT mantuvo el discurso mesurado y se alegró por todo el mundo, partiendo por los hinchas.
“La afición necesitaba este triunfo, por todo lo que hemos vivido, más los jugadores, sus familias, nuestras familias”, comentó el DT.
Además, agradeció a sus dirigidos. “Muy reconfortante el triunfo y la expresión futbolística. La forma leal, generosa en cómo estos muchachos recibieron el mensaje. Que hayan tenido la humildad, teniendo tantas batallas, todo nuestro trabajo y saber que todos tenemos un gran desafío. Hoy era el primero, el desvirtuar el síndrome del campeón, que siempre pierde. Y más cómo veníamos. Si entramos con el hambre, los deseos de gloria, podíamos descifrarlo. Analizamos todas las variantes del profe de Japón, que en todos los partidos mezcló y nunca mostró este equipo que hoy apareció. La gente ojalá siga creyendo en estos hombres”, agregó.
Finalmente, restó dramatismo a los dardos que recibió en la previa. “Toda Latinoamérica es así, se vive con pasión, intensidad, siempre se quiere más y más con una selección que venía de contrastes: de ser bicampeón de América y no clasificar al Mundial de Rusia. Había u conflicto emocional fuerte, una repercusión social, psicológica en el autoestima del pueblo chileno. Teníamos que asimilar el impacto. Los medios hacen su trabajo y esa crítica lo exige a uno, lo compromete y los jugadores también. No nos podemos dejar estar”, concluyó.