No se diga más. Desde que [[Reinaldo Rueda]] asumió el mando de la selección chilena, cinco de los siete goles anotados por la Roja vienen de situaciones de balón detenido o de juego aéreo, una característica que comienza a adueñarse del espíritu de la nueva selección chilena.

No en vano ha aumentado la presencia de jugadores altos y el promedio de estatura aumentó cinco centímetros con respecto al ciclo de Juan Antonio Pizzi. Sobre 1,90 mt aparecen Enzo Roco, Francisco Sierralta, Guillermo Maripán y Lawrence Vigouroux.

La situación ya da dividendos. Maripán por dos y Diego Valdés anotaron de cabeza ante Rumania, Serbia y Polonia; mientras que Arturo Vidal y Miiko Albornoz aprovecharon rechazos; todo después de distintos balones detenidos.

Una circunstancia del juego moderno que podemos ver en cancha nuevamente este martes, ya que la Roja seguramente superará en altura a su rival asiático, que en el Mundial promedió 1,81 mt.

La Roja tendrá enn esta jornada su penúltima práctica de la gira, a la espera de plasmar en solo 90 minutos el trabajo que había adelantado el técnico chileno para el duelo suspendido contra Japón.