La historia dirá que Pelé y Diego Armando Maradona terminaron de amigos. Los últimos años de las figuras sudamericanas fueron de guante blanco, y en alguna medida limpiaron las polémicas que por años animaron el debate sobre quién era el mejor jugador de todos los tiempos, hasta la consagración de Lionel Messi.

Pero el archivo no muerde y tiene un apartado de selección que pinta cuál era el tenor de la relación entre ambas figuras. En 2008, el ídolo brasileño atacó con un gancho al hígado al crack argentino, quizás en el capítulo más controvertido de su carrera deportiva, como fue su relación con las drogas.

Maradona perdió más de la mitad de sus últimos seis años de carrera suspendido por consumo de sustancias ilícitas. El primer dóping positivo fue en 1991 en un partido del Napoli (cocaína); y tres años después repitió por Argentina en el Mundial de Estados Unidos 1994 (efedrina, norefedrina, seudoefedrina, norseudoefedrina y metaefedrina).

El Pelusa puso fin a su carrera profesional en 1997, luego de un nuevo dóping positivo por cocaína, esta vez con la camiseta de Boca Juniors, aunque tanto el jugador como su representante, Guillermo Cóppola, alegaron que la sustancia había sido agregada a la muestra de orina.

Pelé pidió quitarle los títulos a Maradona
 

Al menos de manera pública, Pelé no tuvo esos problemas, aunque los controles de este tipo se hicieron obligatorios recién a mediados de la década de los 80. En su minuto, O Rei incluso desmintió haber utilizado Viagra, pese a que fue el rostro del medicamento para la disfunción eréctil, en su lanzamiento oficial.

Por eso, el brasileño no dudó en atacar a Maradona por su flanco más debilitado. Meses antes de que el argentino asumiera la dirección técnica de la selección de su país con miras al Mundial de Sudáfrica 2010, Pelé le envió un misil teledirigido desde una entrevista concedida al diario Estado de Sao Paulo.

 

 

"Maradona no era un jugador completo. Fue un jugadorazo, pero no remataba con la pierna derecha y no cabeceaba... Y hay otra cosa. ¿Por qué los deportistas olímpicos pierden sus medallas por dóping y él no?", sentenció el tricampeón mundial con la Verdeamarela.

Y como se las sabía por libro, Pelé aprovechó de meter a otras dos estrellas de nivel planetario al debate sobre el mejor futbolista de la historia. "Zico fue el más próximo a mi estilo de juego, pero a mí me gustaba mucho (Alfredo) Di Stefano. Fue mejor, más completo y rápido, hacía muchos más goles", sentenció.