Barcelona parecía estar dejando atrás los malos ratos deportivos e institucionales, pero esta semana se produjo una nueva grieta luego que algunos miembros del plantel renovaran su contrato con el club, pasando por alto el compromiso que habían firmado como equipo.

La humillante caída ante Bayern Múnich, el escándalo de la partida de Lio Messi y la bullada salida de Arturo Vidal y Luis Suárez hicieron que los blaugrana vivieran meses convulsionados, y aunque el club parecía estar entrando en relativa calma, este martes todo estalló otra vez.

Tras el triunfo ante Ferncvaros por Liga de Campeones, el Barca anunció que Gerard Piqué, Ter Stegen, Clement Lenglet, y Frankie De Jong extendieron su vínculo con el club "después de semanas de negociación e incluyen una adecuación salarial temporal".

La extensión contractual de Piqué y Lenglet causó escozor en sus compañeros, quienes lo vieron como una "traición", ya que anteriormente ambos jugadores habían firmado una carta grupal en la que según reportó Marca rechazaban explícitamente negociar con la directiva actual.

"Bartomeu ha utilizado la vieja táctica de divide y vencerás y, de momento, parece que se va a salir con la suya. Habrá que ver cómo influye esto en el terreno de juego. Algunos ya empiezan a pensar mal, que ha habido compañeros que han ido a lo suyo y no han funcionado como grupo", reporta la publicación española.

De esta manera Piqué negoció su estadía en Camp Nou hasta 2024, mientras que De Jong lo hizo hasta 2026 con una enorme cláusula de rescisión que quedó fijada en 300 millones de euros.

Barcelona espera que el tenso ambiente en el vestuario culé no le pase la cuenta al equipo de cara al vital compromiso venidero ante Real Madrid, Clásico que se disputará este sábado a las 11:00 de Chile por una nueva fecha de La Liga.