Este domingo debía jugarse el partido entre Deportes Tolima y Millonarios en el Estadio Manuel Murillo de Ibagué por el Apertura del fútbol colombiano, pero minutos antes del inicio del encuentro todo se arruinó.
Cuando los jugadores se alistaban para comenzar, un hincha local invadió la cancha y agredió con un puñetazo por la espalda al jugador de Millonarios, Daniel Cataño.
El futbolista no se quedó de brazos cruzados y salió persiguiendo al fanático hasta lanzarle una patada. Sus compañeros también lo fueron a buscar, antes de que la policía interviniera y se lo llevara detenido.
Daniel Cataño fue expulsado por el árbitro, Wilmar Roldán, tras la agresión al aficionado, pero al no haberse iniciado el partido, el técnico de Millonarios aún podía reemplazarlo.
El equipo de Bogotá exigió que Cataño pudiera jugar el partido, al ser él víctima de la agresión en un principio. Pero el referee se negó, pues sería antirreglamentario.
Los jugadores de Millonarios se reunieron y decidieron que no jugaría el partido con el argumento de "sentar un precedente". Roldán fue hasta los camarines para convencer al presidente del club, pero la respuesta fue negativa.
Finalmente, después de 40 minutos, el árbitro canceló de manera oficial el partido en Ibagué. Hasta ahora no se ha determinado si el partido se jugará en otra fecha o cómo se repartirán los puntos.
