La parte final del Campeonato Nacional está encendida tras la denuncia de Universidad de Chile contra Colo Colo, donde los azules acusan desacato del técnico Jorge Almirón durante la victoria frente a Huachipato. El equipo laico busca un castigo de tres puntos que puede darle el torneo en bandeja.
Tal como hace unos días informó RedGol, Azul Azul presentó una denuncia ante la ANFP por la presencia del coordinador del equipo, Víctor Vidal, en una zona no permitida. La U busca demostrar que el trabajador usó un dispositivo para hablar con Almirón, ubicado en una cabina del Estadio Huachipato.
Sin embargo, en Colo Colo hay total convicción de que dicha falta jamás existió y ya se definieron los argumentos para enfrentar la acusación. Una fuente del club le aseguró a La Tercera que Almirón no tuvo contacto con nadie y que tienen pruebas de ello.
Además, dicen que el DT tomó una van al estadio y que ni siquiera en el trayecto se comunicó con el plantel o el cuerpo técnico. Por supuesto, no tenía autorizado compartir el bus junto al resto de la delegación, ya que estaba cumpliendo la primera de tres fechas de suspensión tras su altercado con José Cabero.
La estrategia de Colo Colo: lo vieron venir y qué hacía Víctor Vidal
El medio nacional menciona que Colo Colo preveía la constante observación que tendría Jorge Almirón durante el encuentro. “De hecho, les llamó la atención que hubiera un par de personas que, en todo el desarrollo del partido, no despegaron la vista de lo que acontecía en la cabina“, dicen.
Luego está la situación de Víctor Vidal, el hombre apuntado por el árbitro Héctor Jona en su informe y cuya presencia “con un dispostivo electrónico” cerca de la banca motivó la denuncia azul. “Vidal se acerca a uno de los auxiliares para decirle que no había control doping y que la salida al aeropuerto sería más rápida. Por eso aparece ahí“, explicaron de Colo Colo a La Tercera.
Además, dicen que el dispositivo electrónico no correspondía a una radio, sino a un celular. El que sí portaba radio era otro funcionario, quien, según explican en Colo Colo, era un miembro del equipo de seguridad que estaba autorizado por la ANFP y que no apareció en el informe de Jona.