El duelo entre Santiago Morning y San Marcos de Arica por la novena fecha de la Primera B, en el estadio Elías Figueroa de Valparaíso, fue protagonista de un condoro de un metro… literalmente.

Cuando se jugaban los 6 minutos del partido, San Marcos tuvo un tiro libre a favor a unos 25 metros del arco defendido por Leandro Cañete de Santiago Morning.

Eduardo Vilches sacó un derechazo ajustado que dio en el travesaño, bajó para botar en el césped y ser despejado por la defensa bohemia hacia el tiro de esquina. El balón ingresó al menos un metro al impactar el suelo antes de salir de la portería.

Sin embargo, ni el réferi Fernando Véjar ni su cuerpo arbitral advirtió que balón había ingresado en la portería y la joyita de San Marcos se suma a uno de los tantos goles fantasmas en la historia del fútbol.

Los jugadores de San Marcos reclamaron enérgicamente, pero como en la Primera B no hay VAR los alegatos quedaron en nada y el cuadro nortino debió reanudar las acciones desde la equina. Insólito.