Luego de hacer historia fuera de nuestro país, Iván Zamorano volvió a Colo Colo para ponerle el broche de oro a su carrera. Pero al llegar a la final del 2003 ante Cobreloa, vivió una polémica pelea con el árbitro Carlos Chandía, viendo la expulsión y recibiendo un castigo de 11 fechas fuera, lo que adelantó su retiro del fútbol.

 

Una supuesta posición de adelanto en el tercer gol de los loínos desató la furia del plantel albo, que se fue encima del juez. El que la sacó más cara fue Bam-Bam, que le gritó de todo y se vio en la obligación de terminar su aventura en el cacique de la peor manera.

Dicha situación cumplió hace dos días 17 años y las cosas han cambiado mucho entre los protagonistas. En conversación con el CDF, Chandía revivió lo ocurrido y confirmó que se puso en la buena con el goleador.

"Sí, estamos de buena con Iván", comenzó explicando. "Nos encontramos en alguna despedida por ahí, de Marcelo Espina, y después en Calama, para un evento solidario tras la muerte de Fernando Cornejo", agregó.

"Nos encontramos en el hotel, estuvimos juntos, cenamos juntos. Y de vuelta, nos vinimos los dos en el mismo asientos. 1A y 1B eran para Zamorano y Chandía. Ahí pudimos conversar, conversamos harto y se disculpó", agregó.

De esta forma, se pone fin a una de las polémicas más grandes del fútbol chileno, la cual le terminó costando el fin anticipado a la carrera de Bam-Bam. En dicha temporada, disputó un total de 18 partidos, anotando ocho goles.