Acostumbrada a ganar batallas deportivas y personales, Mónica Seles tuvo que encarar un nuevo desafío que nada tiene que ver con tenis.

La ex número 1 del mundo y campeona de nueve Grand Slams, confesó que hace tres años fue diagnosticada con miastenia gravis.

Se trata de una enfermedad autoinmune crónica que interfiere en la comunicación entre los nervios y los músculos, provocando debilidad que empeora con la actividad y mejora con el descanso.

Suele manifestarse con caída de párpados, visión doble, dificultad para hablar, masticar o respirar, y fatiga general. 

Monica Seles durante el Abierto de Canadá de 1995 (Getty Images).

La primera señal llegó mientras jugaba con su familia. En ese momento, notó que veía doble y que no tenía la misma fuerza de siempre.

“Pensaba: ‘Sí, veo dos pelotas’. Son síntomas que no puedes ignorar”, contó. Lo que parecía un mal pasajero terminó con una derivación al neurólogo y un diagnóstico que le cambió la vida.

Una campeona hecha a prueba de todo

Su currículum deportivo habla por sí solo: nueve Grand Slams, 178 semanas como número uno del mundo y un estilo arrollador que marcó una era en el tenis femenino.

Pero Seles no solo brilló con la raqueta, sino que también protagonizó uno de los regresos más emocionantes de la historia del deporte, cuando volvió a las canchas en 1995 tras haber sido apuñalada durante un partido en Alemania dos años antes.

Ese recuerdo sigue intacto, y especialmente lo que vivió al regresar al US Open. “La forma en que me recibieron (…) después de mi apuñalamiento, nunca lo olvidaré”.

Cabe recordar que un sujeto llamado Günter Parche aseguró haberla agredido para lograr que Steffi Graf recuperase el puesto número 1 en el ranking WTA.

Vivir en modo “reset”

Para Seles, la vida ha sido una serie de reinicios forzados. Migró a Estados Unidos a los 13 años, tuvo que lidiar con la fama a los 16 años, superó el ataque en plena carrera deportiva y ahora debe adaptarse a un cuerpo que no responde igual. 

“En términos de tenis, tuve que hacer un hard reset varias veces. Y esto es otro más”, reflexionó.

La ex campeona sabe que su historia sigue inspirando. Por eso decidió contar públicamente su diagnóstico, para visibilizar la enfermedad.

“La pelota sigue botando y tienes que ajustarte. Eso es lo que estoy haciendo ahora”, remarcó.

Monica Seles mira a Carlos Alcaraz en Indian Wells 2025 (Getty Images).