Tomás de Gavardo, primogénito del fallecido piloto Carlo de Gavardo, conversó en exclusiva con Redgol, donde destacó la importancia que tuvo su padre para el deporte motor chileno, aspecto dondese encargó de abrir ruta para todos los que vinieron después de él.
“Él (Carlo) abrió paso en una disciplina que en Sudamérica y en nuestro país no se conocía mucho o casi nada como es el Rally Cross Country”, comentó Tomás y agregó: “demostró que otros que tenían condiciones también podían correr con mucho esfuerzo, como fue el caso de Chaleco (López)”, comentó el hijo del Cóndor del Huelquén.
Pero Tomás cree que el valioso trabajo hecho por Carlo no sólo radicó en su enorme talento para el deporte motor, sino que también tuvo que ver con su calidad humana y la manera de afrontar el los desafíos:
“Con su mentalidad, con su mirada y su perseverancia logró muchas cosas impensadas. Yo era chico, pero hoy me doy cuenta de lo grande que fue como deportista y como persona y cómo marcó tanto a la gente”, relató Tomás.
Siguiendo esa misma línea, el hijo de “Carloco” -como era cariñosamente llamado por sus amigos- reveló que el legado más grande que le dejó su padre fue la manera de enfrentar el diario vivir.
“La forma de poder enfrentar la vida. Aprovecharla. Agradecer lo que uno tiene y el trato con la gente, la humildad… poder ser gentil. Esas son cosas que mi papá me las enseño de forma muy tangible”, contó el joven piloto.
Tomás, quien siguió los pasos de su padre y hoy destaca con títulos como el campeonato nacional de Rally XC 2018 o el torneo mundial Bajas Junior de 2019, recordó que Carlo siempre le enseñó con el ejemplo:
“Me enseñó con actos. Cuando íbamos a escuelitas a hacer charlas o cuando alguien lo paraba en la calle y se quedaba hablando con la gente aunque no se conocieran. Él era muy amigable con todo el mundo”, comentó de Gavardo y agregó: “lo que más me dejó fue su manera de ser como persona abajo de la moto, eso para mí es lo más importante”.
Hoy, en el quinto aniversario de la lamentable muerte del piloto chileno, su hijo Tomás recordó las aventuras viajeras que tuvo junto a su padre, las cuales pese al paso del tiempo siguen muy presentes en su memoria:
“Los viajes que hacíamos una o dos veces al año… íbamos a lugares súper raros… al Amazonas. Fuimos a Paraguay. Cada año hacíamos una locura como esa. O paseos en moto y nos íbamos a acampar en casas rodantes o en carpa. Lo pasábamos súper bien. Tengo los mejores recuerdos y experiencias”, finalizóel joven piloto.
Tomás de Gavardo sueña con lograr algo grande en el deporte, y hoyse prepara con fuerza para competir en el Dakar 2022, el torneo motor más extremo del mundo, donde espera dejar en alto el nombre de Chile y de su padre, el eterno Carlo de Gavardo.