El presidente de la Federación Internacional de Atletismo (World Athletics), Sebastian Coe confirmó este jueves que las personas transgénero no podrán participar de las pruebas femeninas internacionales desde el 31 de marzo de este año. También se acordaron nuevas reglas que impedirán que atletas como Caster Semenya puedan competir.
“El consejo de World Athletics decidió excluir de las competiciones femeninas internacionales a los atletas transgénero hombres y mujeres que hayan tenido una pubertad masculina”, explicó Sebastian Coe añadiendo que “el consejo tomó medidas claras para proteger la categoría femenina de nuestro deporte”.
“La forma de protegerla es restringiendo la participación de los atletas transgénero e intersexuales”, indicó Coe. Estas medidas prohibitorias son las mismas aprobadas por la natación el año pasado al impedir que atletas que han hecho la transición de hombre a mujer y que pasaron su pubertad como personas masculinas.
El presidente de la entidad comentó que estas actualizaciones en el reglamento afectará a 13 atletas que tienen “diferencia de desarrollo sexual”. Una de llas es Caster Semenya, la dos veces campeona olímpica en los 800 metros que desde 2019 no compite en pruebas desde los 400 hasta los 1.600 metros.
La atleta sudafricana deberá tomar medicación durante seis meses para poder competir. Cabe recordar que Semenya es una deportista intersexual y desde abril de 2018 que debe mantener su tasa de testosterona bajo los 5 nanomoles/I durante seis meses para ser autorizada a participar en las distancias entre los 400 y 1.600 metros.
El reglamento actual dictaba que las deportistas transgénero que quisieran participar en la categoría femenina, debían mantener su tasa de testosterona bajo el umbral de 5 nanomoles/I durante un año.”Para muchos, las pruebas de que las mujeres trans no conservan una ventaja sobre las mujeres biológicas son insuficientes.Quieren más pruebas antes de tomar en consideración la opción de una inclusión en la categoría femenina”, añadió Coe.
El Comité Olímpico Internacional (COI) había pedido a las federaciones deportivas en noviembre de 2021 que establecieran sus propios criterios sobre las personas transgénero e intersexuales en las competiciones de alto nivel.