El presente que vive Unión Española es todo menos tranquilo. El cuadro hispano liderado ahora por Miguel Ramírez vive una de las campañas más irregulares en el último tiempo.

Y es que a la temprana eliminación en la Copa Chile ante Deportes Concepción, elenco de la Liga de Ascenso, el último fin de semana, hay que sumar su duro momento en la Liga de Primera, en la penúltima posición, por sobre su exequipo, Deportes Iquique.

Pero los dolores de cabeza para Cheíto no paran, y ahora avisan de una noticia que puede ser un verdadero golpe dentro del pésimo momento por el que pasa el Rojo de Independencia.

El nuevo dolor de cabeza para Miguel Ramírez en Unión Española

Y es que como las malas noticias siempre llegan de a una, hay un elemento dentro de Unión Española que ha sido el bálsamo dentro del mal momento de la institución. Además, pieza clave de la zaga hispana.

Se trata de Nicolás Díaz, hermano del seleccionado chileno y figura de River Plate, Paulo Díaz, quien este martes le dio un dolor de cabeza para Miguel Ramírez en su nuevo proceso en la banca de Independencia.

Nicolás Díaz le anotó, por ejemplo, un gol de penal a Everton en la Copa Sudamericana para avanzar a la fase de grupos. Foto: Dragomir Yankovic/Photosport.

Según el medio partidario Independencia Hispana, que conoce al detalle la actualidad del Rojo, las horas del defensor están contadas, puesto que al término de la primera rueda de la Liga de Primera, el chileno deberá volver a México, y específicamente al Xolos de Tijuana, dueño de su pase.

El temor de los hinchas hispanos se vuelve una realidad, aún más cuando Sabino Aguad, gerente general de Unión Española, lo advertía unos días atrás. “Nicolás Díaz tiene cláusula de salida. Puede ser efectiva en la primera rueda sólo al equipo que nos lo prestó“, expuso.

Y si bien debe volver al ya mencionado club azteca, hay otro club que busca sus servicios, con un viejo conocido a la cabeza. Es el Puebla de Pablo Guede, quien desde México anuncian que irán a la carga por el jugador, aunque todo está por verse. El tiempo será quien decida.