Nano Calderón no ha perdido el tiempo mientras se encuentra en libertad vigilada intensiva, después de que apuñaló a Hernán Calderón Salinas en agosto pasado. El hijo de Raquel Argandoña retomó sus negocios, así como también su posición en el colectivo de fanáticos de los autos “Speed Demons”, por eso ahora ostenta sus privilegios a través de Instagram.
El joven de 23 años zafó de una condena porparricidio frustrado contra su padre, como se había estipulado en una primera instancia, con lo que arriesgabapenas de541 días y dos de 60 días; sino que apenas recibió una pena poramenazas, daños y lesiones.
Desde esa sentencia que se dio a mediados de diciembre, Nano ha aprovechado el beneficio pasando por asados, saliendo con su polola, reencontrándose con amigos y también con su Yellow Demon, además de reactivar sus redes sociales y negocios.
Todo indica que las cosas van bien para Nano, esto después de que mostrara en sus historias de Instagram el dinero que ha logrado reunir hasta ahora, que no son sólo un par de billetessino que contundentes fajos de 5 mil, 10 mil y 20 mil pesos dentro de una caja fuerte.
En otra historia, el hermano de Kel comenzó a evidenciar su adicción por la “Coca”, con una imagen en la que se pueden apreciar nada menos que seis latas de Coca Cola Light vacías junto a una lujosa lámpara con forma de arma dorada.
“Repitan conmigo: Tengo que dejar de tomar tanta coca.Tengo que dejar de tomar tanta coca”, escribió Nano acompañando la imagen y recalcando su humor con un emoticon riéndose.
Pero su obsesión con la bebidala remató mostrando el cargamento de latas que fue a comprar: cinco packs de 24 latas, o sea 120 tarros de la gaseosa.
“Los del local creen que tengo una distribuidora o algo por el estilo… no saben na que son las que me tomo en un día”, bromeó una vez más Nano.
Aunque después aclaró que “cabros no era literal… Tomo mucha pero nunca todas esas en un día tranquilo”, eso antes de sincerar que la verdad es que “tomo como 8 latas al día aprox”.