El día martes 13 es considerado popularmente como uno de mal agüero. No te cases ni te embarques completa la mención a un martes especial en el calendario. La reticencia respecto al día 13 del mes tiene varias justificaciones, pasando por la Biblia, el Tarot e incluso la caída de Constantinopla.
Partiendo desde la historia universal, la caída del Imperio Romano en Constantinopla en 1453 tiene contenido un hecho de muy mala suerte: ochocientos soldados y 15 embarcaciones enviadas hacia Génova, Venecia y el Vaticano cayeron ante los musulmanes. El descalabro militar se lo atribuyeron a las fuertes mareas provocadas por un eclipse lunar ocurrido un martes 13, el cual impidió que los navíos desembarcaran.
Continuando con historia antigua, está descrito en la Biblia que el 13 es un número que representa cosas muy negativas para la religión cristiana. Judas fue el decimotercer invitado a la última cena, considerando los 12 apóstoles además de Jesús. De igual forma, en el capítulo 13 del Apocalipsis se marca la llegada del anticristo.
El Tarot también tiene algo que decir respecto al número “maldito”. La carta número 13 del reconocido mazo de cartas de ciencia metafísica, corresponde a la muerte y a la desgracia eterna. Su nombre es El Arcano XIII y viene representada con un esqueleto que porta una guadaña en la mano izquierda. Con este artefacto corta la cabeza de un niño y la de un rey para demostrar que la muerte no le es ajena a nadie.
¿Por qué martes 13 y no viernes 13?
La explicación yace en la antigua astrología. La palabra “martes” proviene del planeta Marte, que en la mitología romana está ligado al Dios de la Guerra. Además, la relación entre el astro y su color rojo, era conocido como el de la destrucción, la sangre y la violencia.
