En la Cuenta Publica, entregada el uno de junio, el presidente Gabriel Boric anunció el Plan Nacional de Desarrollo Ferroviario. "Este plan contempla desplegar servicios de pasajeros urbanos y suburbanos, mejorar y aumentar significativamente el transporte de carga y avanzar, gradualmente, en la construcción de servicios interregionales de pasajeros en distancias medias y largas. También contempla la infraestructura para servicios de carga y eleva el estándar de calidad en las operaciones actuales, cuidando, además, la probidad en la Empresa de Ferrocarriles del Estado", apuntó el mandatario.
El objetivo es triplicar los pasajeros, "pasando de los 50 millones de personas transportadas en tren el año 2019 a 150 millones de pasajeros durante el año 2026".
Y uno de los anuncios más importantes fue el tren Santiago-Valparaíso.
Esta mañana, en Chilevisión, la ministra Secretaria General de Gobierno, Camilo Vallejo, y el ministro Secretario General de la Presidencia, Giorgio Jackson, dieron más detalles de la propuesta presidencial.
El tren entre la capital y el puerto comenzaría su trabajo el año 2026 para estar operativo en 2032, con una inversión total de tres mil millones de dólares.
La ministra Camila Vallejo explicó que “queremos dar continuidad a lo que se comenzó, lo vamos a mantener con recursos. Porque todos queremos #TrenesParaChile”.

El cronograma presentado por el Gobierno. (Twitter)

El cronograma presentado por el Gobierno. (Twitter)

Los otros tramos

Para 2023 se esperan que estén listos -ya sea por los mejoramientos o por su instalación- los servicios de Nos (US$48,7 millones), reposición Estación Central-Rancagua (US$43m), Talca-Constitución (US$12m), Chillán-Alameda (US$115m) y Temuco-Padres Las Casas (US$2m).
Para 2024 se espera la inauguración de Valencia de Quilpué (US$10m). En 2025, Puente Biobío (US$267m) e Intermodal de Barrancas (US$45m).
En 2026 será el turno de los tramos Melipilla (US$1.580m) y Batuco (US$705m). Y en 2027 estará la extensión Quillota-La Calera (US$506m).