Si usted ve a sus familiares o cercanos con cara de pocos amigos, la encuesta Ipsos de “Felicidad Mundial 2022” puede entregar algunas de las razones para tal actitud. El sondeo, que se realizó a más de 20.500 personas en 30 países, quiso medir el nivel de felicidad de los ciudadanos y conocer cuáles son consideradas las fuentes que entregan mayor satisfacción.
Según la encuesta, un 53% de los chilenos se declara como una persona Muy feliz o Bastante feliz, estando 14 puntos por debajo del promedio mundial (67%) y ubicándose como el cuarto país con el porcentaje más bajo en este ámbito solo superando a Hungría (51%), Argentina (48%) y Turquía (42%).
A nivel global, el 90% de la gente explica su nivel de felicidad en base a la salud física, el 89% la relaciona con la salud mental, 89% con las condiciones de vida (agua o comida) y el 88% con la seguridad personal.
En el caso de Chile, el factor que más influye en la felicidad de las personas es la salud mental, seguido por la salud física y en tercer lugar el “sentir que la vida tiene sentido”. Otros aspectos como tener hijos y la relación con la pareja aparecen bastante más atrás, como las prioridades número 7 y 11 respectivamente, a diferencia de la tendencia global.
“Producto de la crisis de salud nos sentimos en un peligro que no habíamos experimentado previamente y ahora estamos observando las consecuencias de la pandemia. Por tanto, la salud tanto física como mental han sido resignificadas por las personas, entregándoles un mayor valor. Además, en esta experiencia fuimos interpelados respecto del sentido de nuestras acciones y nuestras vidas. Pero los resultados indican también que este momento es más bien individualista que colectivo, primando el interés en el bienestar propio o de la familia por sobre el de la comunidad”, detalló Alejandra Ojeda, Gerente de Estudios Públicos de Ipsos Chile.

¿Y los que no son felices?

Según la misma encuesta Ipsos, el 46% de chilenos se considera “No muy feliz” o “Nada feliz”, cifra que supera en 13 puntos al promedio mundial de infelicidad (36%). Lo positivo es que el nivel de felicidad en el país sube luego de un año de una brusca caída: en 2020 solo el 35% de las personas se definieron como felices, mientras que a fines de 2021 aumentó a 53%, similar a al 2019 (50%).
“El mundo entero ha estado remecido por la crisis de salud producto del Covid, lo que implicó, en muchos países, un fuerte retroceso de la felicidad. En el caso de Chile ese retroceso fue de 15 puntos. Pero estamos en presencia de una recuperación del indicador con la recuperación del uso del espacio público, los re encuentros presenciales con familia y amistades y el retorno a las actividades cotidianas”, agregó Ojeda.