Argentina abrió una investigación ante un posible atentado sufrido por pacientes graves de coronavirus, a quienes les abrían apagado los ventiladores mecánicos.

El hecho ocurrió en el Gran Hospital Perrando de Resistencia, en Chaco, donde siete personas sufrieron con el apagón del aire comprimido que alimenta a los respiradores en las camas de terapia intensiva del hospital.

Afortunadamente el ataque se descubrió a tiempo y fueron reconectados los ventiladores, por lo que no hubo víctimas fatales.

El hecho ocurrió el mismo día que el Presidente de Argentina, Alberto Fernández, visitaría la zona, lo que fue cancelado antes de que ocurriera el incidente.

“No hay palabras para describir lo que pasó. Esto fue un sabotaje, un intento criminal, para mí, perfectamente planificado y tenía que provocar el caos, el día que llegaba nuestro Presidente a Resistencia. No me cabe la menor duda que eso fue un atentado”, aseguró Daniel Pascual, uno de los codirectores del Hospital Perrando.