Matías Fernández marcó 16 de los goles que anotó en su carrera con la camiseta de un club donde es querido hasta el día de hoy. De hecho, durante esta semana del 17 de octubre, el “14” fue agasajado y vitoreado en las redes sociales de dicho equipo.

Uno de los más grandes del fútbol de Portugal. Todas las referencias son para el Sporting Clube de Portugal. Matigol fue albiverde tras su paso por el Villarreal de España. Jugó 116 partidos ahí. Regaló 21 asistencias, además de los ya mencionados festejos.

Varios de esos fueron golazos, como aquel tiro libre imborrable ante el Manchester City. Fernández derrotó la resistencia de Joe Hart con una comba extraordinaria algunos años antes que los petrodólares transformaran al equipo celeste en un plantel al que Josep Guardiola le ha sacado el rédito máximo. Más específicamente en los octavos de final de la Europa League 2011-2012.

En el mismo torneo, casi dos temporadas antes, anotó una obra de arte. Para muchos, un golpe de fortuna. Pero de todos modos tuvo una resolución extraordinaria. Corría el tiempo agregado en el duelo que el Sporting CP le ganaba por 2-0 al Everton inglés. Fernández reemplazó al ruso Marat Izmailov para quemar algunos segundos. Lo suficiente para dejar grabado un golazo que hasta hoy produce ovaciones.

Durante la visita de Matigol a las instalaciones del Sporting Clube de Portugal, el otrora volante ofensivo de los Leones reaccionó a esta conquista. Un broche de oro inmejorable para la eliminatoria, que terminó 4-2 a favor del equipo que entonces dirigía Carlos Carvalhal, hoy DT del Sporting Braga. “En ese arco”, recordó el “14” y apuntó la portería. “Gracias a dios salió el gol. Creo que fue el 3-1 contra el Everton”, complementó.

Matías Fernández reacciona a uno de los goles más bonitos de su carrera

Matías Fernández siente mucha alegría al repasar esta obra de arte, uno de los goles más hermosos que anotó en su carrera. La sonrisa de su cara grafica la belleza del recuerdo. Al chileno le quedó un balón para conducirlo con mucho espacio.

En la marca apareció Phil Jagielka, pero quedó prácticamente en ridículo. Por un pase de taco que Fernández ideó. Aunque terminó en un regate espectacular. Que lo hizo quedar en buena posición ante el golero estadounidense Tim Howard. El ex Manchester United no mejoró mucho a su compañero.

Más bien todo lo contrario. Con un picotón de mucha categoría, Matigol eludió la presencia de Howard. Dejó el arco desguarnecido y sólo empujó la pelota en la boca del arco para darle un dorado cierre a una llave muy favorable para los Leones, que se habían puesto en ventaja con goles de Miguel Veloso y Pedro Mendes.