El campeón vigente de la Superliga china, el Jiangsu FC, cesará sus operaciones, según informó este fin de semana su propietario, el Grupo Suning.
“Debido a la superposición de varios elementos incontrolables, Jiangsu Football Club no puede garantizar efectivamente la continuación de la actividad”, dice el comunicado publicado en redes sociales.
Luego, detalla: “De ahora en adelante, Jiangsu FC se detiene. Cesará la actividad de cada equipo”.
“Aunque somos reacios a dejar marchar a los jugadores que han conseguido los mayores honores para el club (…), lamentamos tener que anunciar que el Jiangsu FC suspende sus operaciones de manera inmediata”, añade.
De esta forma, el club no se inscribirá en la Superliga para esta temporada pues no está a disposición de cumplir con las reglas de la competición.
La suspensión de las operaciones del Jiangsu FC se debe a los problemas económicos del Grupo Suning, que incluso tiene a su millonaria plantilla aún impaga.
La intención del grupo, que también es propietario del Inter de Milán, es salvar al equipo encontrando inversores interesados en comprar el equipo y hacerse cargo de las deudas.
“Esperamos que miembros de la sociedad con conocimientos y empresas hablen con nosotros sobre los siguientes pasos”, dicen desde el Grupo Suning.
Según la prensa china, en caso de no recibir ofertas, intentarán traspasar gratis al club a quien esté dispuesto a hacerse cargo de las deudas. Si no ocurre eso, el club se disolverá inevitablemente.