Después de un gusto, un susto y la frase aplica perfectamente para Barcelona pues luego de su tremendo mercado de fichajes ahora saca cuentas para poder inscribir a todas las incorporaciones pero no es un problema exclusivo de los culés y afecta a otros equipos como el Real Betis, algo que repercute directamente en Claudio Bravo.
¿Qué pasa realmente en La Liga con esta situación? Actualmente son siete clubes de los 20 que hacen vida en el torneo que no han podido incorporar a la totalidad de sus incorporaciones ni a los recién renovados. Todo esto se debe a los límites salariales que se imponen por el fair play financiero y el dolor de cabeza es grande tomando en cuenta que este fin de semana arranca la competición.
Aparte de los culés y los blanquiverdes los otros conjuntos con esta complicación son: Almería, Celta de Vigo, Osasuna, Rayo Vallecano y Real Sociedad. Las razones son varias pero siguen pesando las consecuencias post pandemia, además que el dinero del trato de La Liga con el fondo de inversión CVC fue usado por la mayoría la pasada temporada.
Fueron precisamente los blaugranas uno de los que rechazó ese trato, junto al Real Madrid, pero sus cuentas están complicadas por los elevados contratos que dejó la junta anterior de Josep María Bartomeu y que están intentando solucionar con la activación de las palancas económicas aprobadas además de buscar las salidas de Frenkie De Jong o Memphis Depay.
Si bien el momento de Barcelona es complicado parece tener un poco más de opciones que equipos con presupuestos más modestos. El Betis de Claudio Bravo necesita, sí o sí, vender para poder inscribir y estuvo cerca con la salida de Alex Moreno a la Premier League pero finalmente no se dio. Ahora empieza una pelea en contra del reloj para no perderse las primeras fechas, aunque el plazo es hasta finales de agosto, cuando finalice el mercado de fichajes europeo de manera oficial.