Lamine Diaby-Fadiga dejó perder una de las oportunidades de su vida al ser despedido del Niza de Francia por haber robado un reloj a uno de los compañeros de equipo. Su separación se hizo oficial por parte del club en un comunicado.
Tan solo 18 años años tiene el joven atacante, que ya la temporada pasada había logrado debutar con la institución en la Ligue 1. En la máxima división de Francia ya sumaba seis partidos y había pasado por la selección sub-17 de los galos.
Diabycometió el acto con el reloj propiedad de Kasper Dolberg, quien llegó esta campaña al conjunto, el cual estaba tasado en unos 70 mil euros. En un principio, Niza quiso manejar con discreción pero el danés hizo denuncia en la policía.
“Tras el robo del reloj de Kasper Dolberg, y tras la confesión del jugador, el club tomó la decisión de romper el contrato del atacante de 18 años.Una ruptura con efecto inmediato”, explicó el club en el comunicado.