A principios de 2020, Jorge Valdivia demandó por una millonada a Colo Colo por, según su punto de vista, una serie de incumplimientos en el contrato incluyendo unos amistosos que no se realizaron y que irían en su favor económico.
El Mago se fue dolido del Monumental y no ha desperdiciado oportunidad para pegarle a Aníbal Mosa y, sobre todo, a Harold Mayne-Nicholls, quien se ha transformado en gran antagonista de varios jugadores emblemáticos de los últimos cinco años del Cacique.
Ante esto, Mosa manifestó que quieren firmar la paz con el volante de Mazatlán y que esperan que se desista de la vía judicial. Inclusive, le abrió las puertas del Monumental.
“Lo que está demandando Jorge es un tema de un partido amistoso, que nosotros nos comprometimos con él. El estadio está a disposición”, sentenció el empresario de origen sirio en Al Aire Libre en Cooperativa.
“Si ellos quieren elegir por la vía judicial, es una pena. Pensamos que el Mago se iba a retirar en Colo Colo y eso llegó a los tribunales, si lo podemos arreglar de otra manera sería bueno”, completó.
“No sé qué le habrá pasado (a Mosa) en su retorno de la mano de Harold. A él lo conocí, era un Harold, pero el que llegó a Colo Colo con el mismo proyecto que le presentó a la U, donde le dijeron que no, era distinto. No compartía con los jugadores que públicamente declaramos a favor de él” – Jorge Valdivia el 20 de mayo en Meganoticias.
LA DEMANDA
Todo partió en febrero, cuando se ingresó la demanda al tribunal laboral de Santiago. En este, Jorge Valdivia reclama 356 millones 348 mil pesos por “incumplimiento de algunas obligaciones, cesión de derechos de imagen y derechos económicos”.
Dentro de este documento, se argumenta que se habían pactado unos amistosos para recaudar más dinero y así costear el contrato del Mago, los que no se realizaron.
“Adicionalmente, las partes acordaron que, como contraprestación a los servicios que el jugador prestaría al club, éste tendría el derecho total a lo recaudado en un encuentro de fútbol que supuestamente se realizaría dentro de los primeros 12 meses de suscrito el acuerdo, es decir, entre el 20 de junio de 2017 y 19 de junio de 2018, o la suma mínima garantizada de US$ 200 mil líquidos”, reza esta demanda entre otros puntos.
Por su parte, Blanco y Negro expresó en la oportunidad que el tema de los amistosos era un contrato distinto al laboral hecho por el representante de Valdivia, Mauricio Valenzuela.
“El acuerdo de partido corresponden a un acto mercantil entre las partes; desde que, para un determinado Club, aquello corresponde a una modalidad de negocio, vinculada a la posibilidad de realizar un encuentro amistoso de fútbol, y en orden a las ganancias por sobre el valor de USD 200.000 (doscientos mil dólares) se repartieran en partes iguales con el demandante, existiendo incluso la posibilidad que no se obtuviera ganancia alguna con el negocio acordado entre las partes, lo que evidentemente repugna al Derecho del Trabajo”, sentenciaron en su momento.
Asimismo, y para concluir, desde la concesionaria recalcaron en el primer trimestre de 2020 que “negamos que el actor siempre estuvo llano y dispuesto a participar de los encuentros amistosos a realizar, puesto que es un hecho público y notorio que el jugador únicamente jugó el 41% de los minutos del campeonato nacional 2019, y que en la Temporada 2018 el último encuentro que jugó fue con fecha 20 de octubre de ese año, no jugando las últimas 4 fechas del Torneo de ese año”.
