Los hechos que se produjeron el fin de semana en el Estadio Nacional, San Carlos de Apoquindo y Francisco Sánchez Rumoroso dejaron un lamentable saldo para el fútbol chileno, que nuevamente se ve marcado por la violencia.
En su tribuna de Radio ADN, el periodista Juan Cristóbal Guarello destacó especialmente a los futbolistas que siguieron en cancha e intentaron jugar pese al peligro que representaba la ofensiva de los encapuchados.
“Los jugadores lo pasaron muy mal el viernes en Coquimbo.Por suerte los encapuchados no les pegaron a los jugadores de Coquimbo. Si alguien hubiera encarado, pudo recibir un golpe. Pero los jugadores se quedaron ahí, estuvieron bien”, subrayó.
“Ayer en San Carlos de Apoquindo…yo me saco el sombrero con Luciano Aued, porque en vez de tribunear fue a hablar directo. No sabemos lo que habló, pero los calmó mucho rato.(Matías) Dituro también se plantó bien, (Augusto) Batalla siguió jugando pese a que recibió un pedazo de tablón grande en la espalda”, agregó.
“Hay que entender que los primeros perjudicados son los que están en la cancha, que son los que están más expuestos y que sacaron adelante un partido por las buenas y lamentablemente por las malas”, reflexionó Guarello.
El periodista remarcó la acción de los futbolistas. “Realmente encuentro que lo que hicieron tres o cuatro jugadores y el resto que siguió jugando, pero especialmente los que fueron a encarar a los hinchas; me saco el sombrero porque hay que tener pelotas para hacer eso”.
Y finalmente, reconoció que “hay que ser valientes, porque que un tipo te insulte es una cosa,pero si además la patota está encapuchada, tieneuna carga simbólica de violencia mucho mayor”, completó.