Carlos Alcaraz ya se cansó. Con solo 22 años y cinco títulos de Grand Slam en el bolsillo, el español decidió ponerle fin a una narrativa que lo persigue desde que debutó en el circuito profesional: las constantes comparaciones con Rafael Nadal.
En una reciente entrevista, el murciano fue claro. “No quiero que la gente me llame el sucesor de Rafa”, dijo.
Alcaraz no quiere cargar con el peso de Nadal
Desde su irrupción en el circuito, a Alcaraz no solo lo han señalado como “el futuro del tenis”, sino como el llamado a continuar la dinastía española después de Nadal.
Pero mientras los medios y los fans insisten con la herencia, él prefiere seguir su camino sin etiquetas pesadas.
“Intentamos no pensar en la presión y mucho menos en hacer lo que ellos hicieron”, agregó haciendo referencia al Big Three.
Un presente que ya es historia
Más allá de las comparaciones, los números hablan por sí solos: Alcaraz ya suma dos Wimbledon, dos Roland Garros y un US Open. Igualó la marca de leyendas como Rod Laver y John Newcombe, y superó a nombres como Wawrinka, Courier y Murray.
Pero a pesar del ruido externo, su mensaje es claro: quiere escribir su propia historia.