El gin tonic es uno de los tragos que más popularidad ha ganado en los últimos años en los bares y hogares chilenos (aunque nunca dejaremos de lado la piscola, se sabe) y por lo mismo aún hay cierto desconocimiento de cómo se debe preparar si no eres un barman profesional.
Ante eso nos hemos sacrificado y estuvimos junto al centro de investigación de Redgol analizando durante meses en el laboratorio los mejores secretos para hacer el gin tonic perfecto y estas son nuestras recomendaciones:
1.- Fijarse en la temperatura del gin
El gin se debe servir a una temperatura que esté entre los 11 y los 15 grados, es decir, se debe servir fría, ya que así se disimula el sabor de los ingredientes más amargos de la mezcla. Para esto se recomienda meter el vaso en el congelador unos minutos antes de servir o si prefieres, le puedes poner hielo.
2.- No diluyas en exceso el gin
Acá es importante el tipo de hielo que se use. Para eso lo mejor es uno que no se derrita tan rápido, ya que se diluirá y ocultará los sabores del gin. Por lo mismo enfriar el vaso antes es la mejor alternativa y NUNCA uses hielo picado.
3.- Usa el acompañamiento que corresponda
El gin tonic no se sirve siempre con una rodaja de limón y una de pepino. Este es un gran error, ya que el acompañamiento o guarnición va a depender del tipo de gin que se esté usando. Si es más agrio, ahí se aplica el limón, si es picante, lo mejor es el romero. y así.