El mejor del ataque, aunque su aporte se diluyó con el equipo en desventaja, cuando se alejó del área. Supo armar juego con muy poco y llegó al gol.
Perdió el puesto antes de la Copa América y pese a la sequía de Eduardo Vargas, no accedió a una opción más concreta en el equipo. No sumó.
Le marcó dos goles a Japón y su producción decayó a nivel bajo cero. El penal perdido ante Perú confirmó la necesidad de más opciones en el puesto de centrodelantero. No recibió gran juego, pero erró lo poco que tuvo.
Se sacó la mochila al reemplazar a Alexis ante Argentina, mostró movilidad y mucha hambre. A los 30 años, se le acaban las opciones.
No tiene sintonía con sus compañeros y las opciones parecen agotadas después de su ingreso ante Perú. Dio un nuevo paso hacia atrás.