Siempre se ha destacado que Nicolás Jarry cuenta con una fisionomía perfecta para mostrar un tenis agresivo, independiente de la cancha en la que esté jugando. Su metro y 98 centímetros, prácticamente lo obligan a jugar de esa forma, independiente que el chileno se defiende bastante bien en la defensa.
Pero aún así, previo al gran año que viene mostrando, daba la sensación que en el saque, al menos desde lo teórico, no dominaba de la forma en que debía dominar. Sumaba demasiadas doble faltas y permitía demasiadas oportunidades para quebrar.
Sin embargo, en este 2023 la situación ha cambiado drásticamente. Y es que Jarry ha mostrado un dominio que pocos jugadores tienen en el circuito, al menos con ese golpe, y por lo mismo, producto de un listado que elabora la ATP y que destacó La Tercera, se puede ver que el Príncipe aparece dentro de los cinco mejores del circuito en la faceta del servicio.
De hecho, es cuarto. Solo es superado por Nick Kyrgios (307,1), el polaco Hubert Hurkacz (295) y el número uno del mundo Novak Djokovic (292,8). ¿Cómo se calcula este coeficiente? “La efectividad al saque suma los porcentajes métricos con el promedio de número de aces por partido y resta el promedio de dobles (faltas) por partido”, explica la Asociación de Tenistas Profesionales.
Ante ese panorama, Jarry promedia un 64,3% de primeros servicios; un 77,7% de puntos ganados con el primer saque; un 53,9% de puntos ganados con el segundo saque, mientras que ha ganado el 87,1% de los juegos en que le ha tocado servir. Asimismo, registra 9,4 aces por partido y apenas 2,1 dobles faltas por cada duelo disputado.
Registros que pueden seguir mejorando en la temporada en césped, que siempre favorece a los grandes sacadores. Por ahora, Jarry ha demostrado que el pasto le viene ideal y ya sumó un triunfazo ante Stefanos Tsitsipas (5°). Ahora irá por otro ante el siempre complicado Alexander Zverev (22°).