Kasper Schmeichel jugó un partidazo ante Croacia y mantuvo con vida a Dinamarca hasta la tanda de penales. El portero del Leicester City le atajó un lanzamiento desde la pena máxima a Modric cuando terminaba el alargue y luego aportó con dos atajadas más en la serie definitoria.
Por eso, Peter Schmeichel, padre de Kasper, se volvió loco en el estadio. El ex futbolista vibró con las atajadas de su hijo, pero terminó desolado y triste tras la eliminación de Dinamarca de la Copa del Mundo.
Rakitic anotó el 3-2 final para la victoria croata en la tanda de penales, ahí se desató la locura para el próximo rival de Rusia.